This site uses cookies to provide you with more responsive and personalized service and to collect certain information about your use of the site. You can change your cookie settings through your browser. If you continue without changing your settings, you agree to our use of cookies. See our Privacy Policy for more information.
16 de diciembre del 2021 | 1 Corintios 1:1–9
¿Alguna vez has estado en una conversación con un pretensioso? Estas personas buscan cada oportunidad para contarte de todas las personas poderosas o importantes que conocen. La razón de este comportamiento no es difícil de entender. Al destacar su relación con estas personas importantes, esperan ganarse la admiración y el respeto.
Esta semana nos estamos enfocando en otro regalo que hemos recibido en la venida de Jesucristo: el regalo de una relación con Dios. Debido a que Cristo vino a la tierra para vivir entre nosotros, podemos tener una relación cercana con Él. Durante los próximos días, examinaremos qué hace posible la relación, varios aspectos diferentes de ella y qué significa este don de relación para el creyente.
En la lectura de hoy, Pablo abre su primera carta a la iglesia en Corinto destacando su relación con Cristo. Tres veces les recuerda a los corintios que están "en Cristo" (vv. 2, 4, 5). Esta frase enfatiza nuestra estrecha conexión con Él. Nosotros no solo estamos acercándonos a Él, estamos íntimamente conectados. Nuestra identidad está ligada a la Suya (Romanos 6:1–14).
Pablo da gracias a Dios por la gracia que les ha sido dada a los corintios “en Cristo Jesús” (1 Corintios 1:4). A través de esta relación, Dios les ha proporcionado dones espirituales para ayudarles a ministrar en el presente (v. 7). También los ayudará a perseverar fielmente hasta que Cristo regrese (v. 8). Todo lo que tienen en Cristo es un regalo desde su conversión inicial, hasta su continuo crecimiento en santidad, hasta su segura esperanza para el futuro. Pablo les recuerda su llamado principal. Dios los ha llamado, ante todo, "a la comunión con su Hijo, Jesucristo nuestro Señor" (v. 9).
|
|
|
|
POR RYAN COOK |
|
Ryan Cook es profesor asociado de Antiguo Testamento y Hebreo en Moody Theological Seminary. Ha trabajado en el campo de la educación cristiana y fue pastor en Michigan durante siete años. Ryan, su esposa Ashley y sus tres hijos residen en el noroeste de Indiana.
|